DE LO MÁS NORMAL
Digan lo que digan, a veces el hábito hace al monje. En la librería “Artimaña”, los personajes de todos los libros que hay en su interior tienen una treta, una artimaña para salirse de la caseta mientras todas las demás permanecen cerradas. Normalmente regresan a tiempo para que sus dueños no se percaten de su ausencia, pero a veces lo hacen tan precipitadamente que se confunden de libro. Por eso no te extrañe, si compras allí el cuento de Caperucita, encontrarte a uno de los tres cerditos durmiendo plácidamente en la cama de la abuelita: suele pasar.
José Manuel Dorrego Sáenz
Finalista, III Concurso ePRIZES de Literatura Instantánea